“Entre hermanos, sueños y partidos de baloncesto crecí”, apunta uno de los raperos españoles más importantes, Nach, en una de sus canciones referencia, “El Cuentacuentos”. Red Bull ha citado a los medios, como calentamiento para la final nacional, en las canchas de baloncesto de Pacífico, en pleno centro de Madrid y en un ambiente callejero. La pista está debajo de un puente –y menos mal, porque la mañana ha salido muy lluviosa- y los aledaños conforman un entorno de cultura urbana estándar: vías de tren cercanas, muros con graffitis, un skate park… Es jueves por la mañana y los únicos que prueban a meter triples o a hacer parkour son los dieciséis gallos que lucharán este sábado por el ser el mejor de España y representarnos en la final internacional de Argentina el próximo 4 de diciembre.
Los raperos interrumpen sus tiros a canasta según son llamados por los medios. Saben a lo que vienen y que su reputación se la juegan también cuando están delante de un micrófono debajo del escenario. Acostumbrados a comunicarse a través de las redes sociales o de ser entrevistados por gente del propio mundo del hip-hop, se acercan al que les va a preguntar con una simpatía, cercanía y agradecimiento que parecen muy sinceros. Aunque en el caso de varios vivan del freestyle, la juventud hace que no olviden que esto que están viviendo es un juego, por más que el rap sea competición y estén ante –quizá- la prueba que más les pueda hacer despegar en su gremio.
“Más que la ronda en la que caiga, mi intención es salir a disfrutar al 100%, porque ninguno de los años anteriores he podido hacerlo”, dice BTA, uno de los jóvenes veteranos que está en la terna de los seis máximos favoritos.
A Zasko, otro de los sub-23 pero con mucha experiencia ya encima, le cuestionamos por cómo explicaría lo que es una batalla a alguien que no haya visto ninguna: “Lo tiene que mirar con los mismos ojos que cuando va al cine o al teatro: es un arte interpretativo. Todas las cosas negativas enfocadas a la humillación que se hagan dentro de ese contexto de batalla se han de quedar ahí, igual que el malo de la película deja de serlo en el momento en el que salen los créditos”. ¿Y valores? “Yo les diría que se quedasen con el abrazo cuando acaba la batalla. Realmente demuestra el compañerismo que hay detrás de esa retahíla de insultos. Es como un boxeador: puede respetar a su enemigo pero cuando sale a competir tiene que combatir”.
Eude va en la misma línea: “Esto es un deporte mental, como podría ser el ajedrez. Tiene mucho entrenamiento y mucha práctica. Que se dejen ya de estigmatizar: no somos raperos malos, gángsters y drogradictos que se insultan. Es mucho más que eso y cada vez más gente se está dando cuenta”. El madrileño apunta que “cada vez más padres vienen con sus hijos” y que se está haciendo fan gente cada vez más mayor. “Y eso está muy bien”, apunta desde fuera de la pista –está resfriado- el gallo con más edad de la Red Bull: “Más vale el viejo por viejo que por diablo. He vivido más cosas que los niños estos”, concluye riendo el argumento.
Blon está en todas las quinielas como el gran favorito para ganar. “Sí que puede ser mi año. Es difícil porque, a pesar de tener más experiencia y rodaje, hay un gran nivel. Creo que estoy quemando mis últimos cartuchos en esta competición y sería muy bonito poder ganar después de tanto tiempo”. Al barcelonés le preguntamos por un factor que los gallos señalan como determinante en una competición donde se prueba la brillantez y el ingenio al momento: la ansiedad y los nervios: “Que tanta gente me ponga como favorito, tanto en las redes como en mi entorno, sí supone una presión añadida. Tienes miedo a decepcionar”.
Sobre ese mismo factor, el que más le aleja del juego del rapeo, le preguntamos a Walls, otro de los grandes señalados para ganar. Al murciano, campeón de dos regionales de Red Bull con 18 años, los nervios le traicionaron en la nacional del pasado año. “La presión de 2017, que me la puse yo, ya está olvidada. Si salgo a hacer lo que sé, en vez de salir a ganar, los resultados pueden caer”, apunta, mientras señala que “esta vez estoy disfrutando la convivencia. Mira, estoy aquí jugando al baloncesto. La batalla es el sábado y no voy a estar comiéndome la cabeza los días de antes«. También sacamos un tema candente en el mundo de las batallas: el apoyo del público a los participantes locales. Walls cree que el público de Madrid es “imparcial. Es la capital de España, la ciudad más grande y es un público que ha vivido mucho rap y muchas batallas”.
Alguien que también sabe del calor de la gente es Force. Ser subcampeón nacional y su medio millón de suscriptores en su canal de Youtube son sus grandes avales. “Supongo que tendré más apoyo que otros gallos más desconocidos pero, mira, a mí el año pasado contra BTA al salir me apoyaban menos y al ganar eso cambió. A lo mejor ahora salgo, llega cualquier otro, me gana y le acaban apoyando más a él”. Madrid terminará aplicando la meritocracia, parece.
Uno de los MC’s que jugará en casa es Bnet, repescado a última hora por la ausencia de Barón. “Estoy disfrutando de estos tres días aquí con todos, que encima la mayoría son buenos amigos”, nos dice, enfatizando en que está con “más ganas” por ser “en mi ciudad. Mira, nos han traído a esta cancha a las que yo venía a jugar antes de rapear”. “Entre hermanos, sueños y partidos de baloncesto crecí”, nos recuerda Nach en la cabeza. ¿Vas a variar tu estilo, muy técnico y donde prima el flow, por más sangre como la que pide Red Bull? “Lo que yo voy a intentar es rapear como a mí me gusta y como hago en la calle, como rapeo diariamente, cosa que no se ve y aún no he conseguido trasladar a los escenarios”.
Cada vez hay menos gallos sobre la pista y más desperdigados atendiendo a la prensa. Grabadoras, fotos, vídeos… seguro que alguna story en Instagram se está grabando. Concluimos nuestra ronda con uno de los favoritos y que también se caracteriza por destacar en fluidez y técnicas.
Errecé tiene un plan distinto al de Bnet: “En Red Bull no uso mis armas totalmente: mi terreno es el freestyle y no tanto las batallas. Me amoldaré a ese juego porque tengo muchas ganas y creo que también muchas posibilidades”. El valenciano se muestra, asimismo, pragmático en cuanto a los enfrentamientos, cuyos cruces en primera ronda podrán elegir según vayan saliendo los nombres: “Lo que elija va a depender de estado de ánimo y de los cuadrantes que yo vea. Hay que saber jugar las cartas y no siempre gana el mejor, sino el más listo y el que mejor conecta con el público. Eso es fundamental”.
La última para Errecé es sobre la formación del jurado, también algo importantísimo en una disciplina subjetiva y que tanto debate genera siempre. “Es la mejor que se ha hecho hasta ahora. Son freestylers que saben de qué va la historia. Otros años, y lo digo abiertamente, creo que no estaban a la altura, porque había algunos que eran letristas y a lo mejor no ven todas las skills y estructuras que nosotros hacemos”.
Es momento de alejarse. Los gallos, los que pueden, siguen haciendo entradas a canasta, probando desde la línea más allá de los 6,25 y vacilándose los unos a los otros. Podrían ser unos chavales cualquiera jugando al baloncesto. Y, de hecho, es lo que son. El sábado la cosa cambiará, seguro, y se pondrán el traje de freestylers para disfrutar e intentar ganar, los dos verbos que más han repetido esta mañana. De eso va la batalla de gallos. De eso va el hip-hop. De eso va la vida.
[…] Blon ya no se levantaría de su asiento. El tiempo dirá si es su última participación en Red Bull. Mientras tanto, Bnet se deshacía sin mucho ruido del veterano […]